Una visita "caballeresca". La vida de los jóvenes caballeros del siglo XIX, el Museo Histórico del Cuerpo de Caballería y la Belle Epoque de Pinerolo

La experiencia

Entre el siglo XIX y principios del XX, mientras muchos piamonteses abandonaban nuestros valles en busca de fortuna, muchos jóvenes llegaban a Pinerolo a la prestigiosa Escuela de Caballería.

Acompáñanos a conocer el Pinerolo del siglo XIX y la Belle Epoque, que de 1849 a 1943 albergó la Escuela de Caballería, fundada en Venaria en 1823 y que acaba de celebrar su 200 aniversario. El cuartel general de Pinerolo fue elegido en 1849 por el Ejército Real «por la suavidad del clima, la abundancia de agua y forraje y la salubridad de la tierra» pero, también, para mantener a los estudiantes alejados de la capital, considerada «especialmente para los jóvenes un peligroso centro de atracción» (de las Memorias del general Carlo Montù).

La caballería tiene una historia fascinante y antigua y nuestro paseo por el Museo Histórico del Cuerpo de Caballería te permitirá conocer la vida de jóvenes Caballeros, y entre ellos muchos de familias ilustres, que entre el siglo XIX y principios del XX llegaron a Pinerolo para estudiar y prepararse para una carrera como oficiales. Entre uniformes, condecoraciones, armas y, sobre todo, historias de caballos y hombres, conocerás al capitán Federigo Caprilli, un gran instructor de equitación e inventor, a principios del siglo XX, del método de equitación llamado «Naturale Italiano», que apoya los movimientos naturales del caballo y es capaz de crear un profundo entendimiento entre corcel y jinete.

Pero eso no es todo: visitarás con nuestro guía el centro histórico frecuentado por los estudiantes de oficiales de la Belle Epoque, la famosa Escalera Santa y la Cavallerizza Caprilli, construida entre 1909 y 1910 por los Ingenieros Militares, hoy en día la estructura más antigua de su tipo y la escuela de equitación cubierta más grande de Europa.

Y por último, descubrirás por qué la especialidad de repostería típica de Pinerolo se llama Torta Zurigo… Disfrútalo en los cafés históricos de la ciudad.